Si te dicen Shanghái que es lo primero que se te viene a la
cabeza? Supongo que lo mismo que a mí, la imagen desde el “bund” o su paseo
marítimo hacia el otro lado del río, el distrito de Pudong, el barrio
financiero.
Después de explorar Pekín, cogimos un vuelo interno ( allí
los vuelos internos se hacen en aviones de los grandes ) y en dos horas nos
plantamos en Shanghái, la ciudad más poblada del país, con más de 23 millones
de habitantes.
Shanghái cuenta con dos aeropuertos, Pudong y Hongquiao, ambos lejos del centro de la ciudad, pero bien comunicados a través del metro, por lo que os recomiendo este medio de transporte para ir y volver a ambos aeropuertos.

¿Qué es lo que más me gustó de la ciudad?
Pues fue subir a la Torre Shanghái, a día de hoy el 2
edificio más alto del mundo, con 632 metros de altura. Sacamos la entrada por
internet para evitar colas, pero es cierto que allí no vimos mucho jaleo en las
taquillas.
Como nota que sepáis que no se puede entrar con mecheros, al
igual que en los aeropuertos.
Os dejo varias fotos que nos hicimos desde arriba, como os
digo es lo que más me gustó de la ciudad!



¿Qué más se puede ver en la ciudad?
El jardín Yuan Yuan es otro imprescindible de la ciudad, un
jardín tradicional chino que os recomiendo visitar. Dentro del jaleo de la
ciudad, aquí se respira más tranquilidad ( algo parecido al Central Park en
Manhattan )
También tenéis que visitar la Nanjing Road, ya que es la calle comercial más importante de la ciudad ( aquí es donde vimos que los peatones teníamos que ir andando en un sentido por una acera y en el otro sentido por la acera contraria, de la aglomeración de gente que hay). Aún así, que nadie se asuste, que es muy llevadero, y se agradece esta separación por ambas aceras.

También está el Templo del Buda Jade, si tenéis tiempo os aconsejo visitarlo. Se ve enseguida.
Un paseo por la “old town”, esta zona me gustó mucho la
verdad, muy buen ambiente, con tiendas y puestos para comer.

Si tenéis tiempo, os recomiendo que cojáis un tren hacia
Shuzhou a pasar el día. No me enamoró esta ciudad, pero también tiene su
encanto. Está a una hora de Shanghái.
Hasta aquí mis imprescindibles de la ciudad, aunque hay muchas cosas más que hacer!! Hay más barrios por los que pasear, como la concesión francesa, y más sitios que visitar.
Después de conocer Pekín, Shanghái y la gran muralla, tengo
claro que volveré a China, me quedan muchas zonas por explorar!
